Buen día, hace mucho que no hablamos, quisiera conversar contigo en persona, pero honestamente no tendría el valor para decirte lo que siento.
Cuéntame de tu vida, de tus sueños y metas, rompamos el hielo, antes de que me congelen los nervios.
Recuerdo que te gustan los abrazos, y que hagas lo que hagas, lo haces sonriendo, recuerdo tu locura y tu creatividad por impulsos.
Me gusta tu cabello a la luz de las mañanas, me gustan tus ojos, son tan hermosos, aunque suene a cliché, me gusta tu sonrisa tan tierna y la timidez con la que se oculta en tus labios.
Me gustas y es hoy que me atrevo a decirlo por que no tengo nada que perder, por que no quiero comenzar mi día, otro día sin soltarlo, sin ser honesto, sin servirme vulnerable ante la vida.
0 comentarios:
Publicar un comentario